Vigilancia espacial: SpaceX nunca ha tenido una relación particularmente amistosa con los contratistas y fabricantes de defensa tradicionales. Sin embargo, la compañía supuestamente está lista para enviar una flota de satélites espías secretos estadounidenses a la órbita terrestre baja.
Fuentes anónimas dijeron a Reuters que SpaceX está trabajando con el contratista aeroespacial y de defensa Northrop Grumman para desarrollar una red muy avanzada de satélites espías. Los dispositivos están casi listos para ser lanzados a bordo de un cohete Falcon 9. Es probable que el gobierno de Estados Unidos los utilice para adquirir imágenes de alta resolución de la superficie de la Tierra.
La constelación de «cientos» de satélites espías forma parte de un contrato de 1.800 millones de dólares entre SpaceX y la Oficina Nacional de Reconocimiento (NRO), la agencia de defensa estadounidense que opera satélites de reconocimiento estadounidenses. Northrop Grumman, uno de los mayores fabricantes de armas y proveedores de tecnología militar del mundo, está aportando soluciones de vigilancia específicas, como una serie de sensores para un subconjunto de satélites espías.
Una de las fuentes dijo que al «interés del gobierno» le conviene evitar invertir demasiado en una sola empresa «dirigida por una sola persona», una explicación que proporciona una definición casi perfecta de cómo opera SpaceX. Northrop Grumman instalará su tecnología en al menos 50 de los satélites. Otros contratistas están trabajando en componentes adicionales, y SpaceX coordina los esfuerzos.
SpaceX no es ajeno a los enjambres de satélites. Puso miles de satélites para el servicio de Internet Starlink. La NRO está interesada en explotar la probada capacidad de la compañía para lanzar «megaconstelaciones» a través de sus instalaciones de fabricación existentes y del portaaviones reutilizable Falcon 9. Los nuevos satélites son una red «proliferada» de enjambres de dispositivos de vigilancia individuales menos vulnerables a un ataque a gran escala (aunque todavía teórico) por parte de entidades enemigas.
Los nuevos satélites cuentan con sensores de imagen de una calidad excepcionalmente alta, con una resolución que supera las capacidades de algunos de los mejores satélites espías empleados actualmente en Estados Unidos. En teoría, los militares podrían utilizarlos como alternativa a los drones y aviones de reconocimiento para tareas de vigilancia sin riesgo de violar el espacio aéreo extranjero.
Los conocedores dijeron que los primeros elementos de la nueva red de espionaje se lanzarán el próximo mes desde la Base de la Fuerza Espacial Vandenberg en California. El subdirector principal de la NRO, Troy Meink, confirmó el lanzamiento y afirmó que será solo la primera de seis operaciones idénticas programadas solo para 2024.