¿Lo que acaba de suceder? No es la primera vez que Rusia advierte que el uso de SpaceX y otros satélites comerciales con fines militares por parte de Estados Unidos los convierte en objetivos legítimos. La noticia llega poco después de un informe de que SpaceX está construyendo una red de cientos de satélites espías bajo contrato con una agencia de inteligencia estadounidense.
A principios de este mes, Reuters reportado que la unidad de negocios Starshield de SpaceX estaba construyendo una red de espionaje en virtud de un contrato de 1.800 millones de dólares firmado en 2021 con la Oficina Nacional de Reconocimiento (NRO), una agencia de inteligencia que gestiona satélites espías.
El objetivo del programa es mejorar la capacidad del gobierno de Estados Unidos para detectar rápidamente objetivos potenciales en casi cualquier parte del mundo.
En respuesta a ese informe, la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zakharova. dicho «Somos conscientes de los esfuerzos de Washington por atraer al sector privado para que sirva a sus ambiciones espaciales militares».
Zakharova añadió que los satélites podrían «convertirse en un objetivo legítimo para medidas de represalia, incluidas las militares».
SpaceX ha suministrado más de 42.000 terminales Starlink a Ucrania y los ha mantenido desde que Rusia invadió, ayudando a mantener en línea la infraestructura crítica de la nación y a sus ciudadanos.
Esta no es la primera vez que Rusia amenaza a los satélites Starlink. Durante una reunión del grupo de trabajo de las Naciones Unidas sobre la reducción de las amenazas espaciales en 2022, Konstantin Vorontsov, miembro de la delegación rusa, dicho que el país «quiere subrayar una tendencia extremadamente peligrosa que va más allá del uso inofensivo de tecnologías espaciales y que se hizo evidente durante los acontecimientos en Ucrania. Es decir, Estados Unidos y sus aliados utilizan elementos de infraestructura civil, incluida la comercial en el espacio ultraterrestre con fines militares». El miembro del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso y jefe de la delegación de la Oficina de Asuntos de Desarme de la ONU añadió la advertencia de que la «infraestructura cuasi civil» puede convertirse en un objetivo legítimo de represalias.
A principios del año pasado, SpaceX interrumpido Ucrania utilice su servicio Starlink para controlar drones, señalando que el sistema nunca estuvo destinado a ser utilizado como arma.
En febrero, el director ejecutivo de SpaceX, Elon Musk, se vio obligado a denegar afirma que Starlink está siendo utilizado por fuerzas rusas en territorios ocupados de Ucrania, algo de lo que la Agencia de Inteligencia de Defensa de Ucrania (GUR) afirmó tener pruebas. «Hasta donde sabemos, ningún Starlink se ha vendido directa o indirectamente a Rusia», dijo Musk. Los demócratas de la Cámara de Representantes son investigando SpaceX con respecto a los informes.
No es sólo Rusia la que ha expresado su preocupación por SpaceX. Un artículo de investigadores afiliados al gobierno publicado por Modern Defense Technology de China en 2022 decía que la nación asiática debería desarrollar métodos destruir sus satélites, lo que había traído peligros y desafíos ocultos al país.