Los diferentes tipos de claves de seguridad de red ofrecen distintos niveles de protección. Los más utilizados son WEP, WPA, WPA2 y WPA3. WEP (Wired Equivalent Privacy) fue uno de los primeros protocolos de seguridad implementados en redes inalámbricas. Su objetivo principal era proporcionar un nivel de seguridad equivalente al de las redes cableadas. Sin embargo, con el tiempo, WEP se ha vuelto obsoleto y vulnerable. Su principal debilidad radica en el uso de claves de cifrado estáticas, que son fáciles de descifrar con herramientas de piratería modernas.
WPA (Acceso protegido Wi-Fi) se desarrolló para abordar las debilidades de WEP. Cuando se introdujo, supuso un importante paso adelante en la seguridad inalámbrica. WPA emplea el Protocolo de integridad de clave temporal (TKIP) que cambia dinámicamente las claves utilizadas para cada paquete, lo que dificulta mucho que los piratas informáticos obtengan acceso a su red. Aunque WPA proporciona mayor seguridad en comparación con WEP, no es totalmente infalible.
WPA2 ha sido el estándar de la industria durante varios años como una mejora de WPA. Introdujo el Estándar de cifrado avanzado (AES) para el cifrado de datos, lo que proporciona un nivel de seguridad significativamente mayor. AES es un método de cifrado robusto utilizado en todo el mundo, incluso por los gobiernos, para proteger información clasificada. WPA2 ofrece dos modos: Personal (WPA2-PSK) para redes domésticas y de pequeñas oficinas y Enterprise (WPA2-EAP) para organizaciones más grandes que requieren medidas de seguridad adicionales.
Se introdujo el último estándar en seguridad inalámbrica, WPA3, para mejorar aún más la seguridad y simplificar el proceso de protección de dispositivos. WPA3 ofrece protección mejorada contra ataques de fuerza bruta mediante la implementación de Autenticación simultánea de iguales (SAE), un nuevo método para establecer un intercambio de claves inicial seguro. Además, comparado con WPA2, WPA3 proporciona mayor privacidad en redes abiertas mediante cifrado de datos individualizado. WPA3 es particularmente beneficioso para dispositivos en espacios públicos o dispositivos IoT, que a menudo requieren protocolos de seguridad más sólidos.