Un juez federal ha expresado su preocupación sobre si Apple tiene barreras demasiado complejas que podrían disuadir el uso de métodos de pago alternativos en iPhone aplicaciones.
La orden judicial de la jueza Yvonne González Rogers exige que Apple permita a los desarrolladores de aplicaciones insertar enlaces a sistemas de pago alternativos. Su objetivo es disminuir el dominio de la empresa sobre las transacciones de aplicaciones, donde las comisiones oscilan entre el 15% y el 30%.
La estructura de comisiones es una importante fuente de ingresos para Apple y un punto focal de discordia con respecto a la equidad del mercado y la elección del consumidor. La defensa de la empresa gira en torno a la seguridad y el mantenimiento de un estándar de calidad dentro de su ecosistema, según a un informe de La Prensa Asociada.
Durante una audiencia de cuatro horas, el juez González Rogers expresó frecuentemente frustración y escepticismo al interrogar a Matthew Fischer, el ejecutivo de Apple responsable de la tienda de aplicaciones para iPhone. Sus preguntas transmitieron preocupaciones de que los esfuerzos de cumplimiento de Apple estaban más centrados en proteger sus ganancias que en facilitar un acceso más accesible a opciones alternativas de pago dentro de la aplicación, como pretendía su orden.
Específicamente presionó a Fischer sobre si Apple había diseñado intencionalmente sus métodos de pago alternativos para que fueran demasiado complejos y confusos para los consumidores. «Aparte de sofocar la competencia, no veo otra respuesta», dijo el juez González Rogers.
Fischer afirmó que Apple se adhiere a la directiva del tribunal y al mismo tiempo pretende proteger a los usuarios de iPhone de entidades maliciosas en línea y garantizar que la empresa se beneficie de sus inversiones en la tienda de aplicaciones y software móvil.
Explicó que se ha implementado una nueva estructura de comisiones, que van del 12% al 27%, siendo la tasa efectiva esperada para transacciones digitales mediante métodos de pago alternativos alrededor del 18%. «Estamos dirigiendo un negocio», comentó Fischer, indicando las consideraciones financieras detrás de los esfuerzos de cumplimiento de Apple.
El discurso en torno a las políticas de la App Store de Apple no se limita a los tribunales estadounidenses. Debates similares se están desarrollando a nivel mundial, y Apple enfrenta desafíos legales en Corea del Sur y la Unión Europea por cuestiones similares.
En Corea del Sur, se han promulgado nuevas leyes. sido promulgado obligando a Apple a abrir su App Store a métodos de pago alternativos, lo que refleja un creciente impulso global para regular más estrictamente las empresas tecnológicas dominantes.
A pesar de los desafíos legales, muchos desarrolladores y consumidores continúan apoyando el modelo existente de Apple, valorando la seguridad y la perfecta integración que ofrece. El soporte subraya el complejo equilibrio entre fomentar un panorama competitivo abierto y mantener un entorno controlado que garantice la seguridad y la confianza del usuario.