Ford no es el único actor importante que adopta el estándar NACS, ya que varias otras empresas, incluidas Volkswagen, Hyundai, BMW, Mercedes-Benz, General Motors y Toyota, se unieron al tren en 2023. De hecho, las únicas empresas automovilísticas tradicionales importantes Entre los que aún no han adoptado el estándar se encuentran Mitsubishi y el Grupo Stellantis (que posee marcas como Jeep, Fiat, Maserati y Ram).
La decisión de adoptar una carga estandarizada se considera un esfuerzo colectivo dentro de la industria para abordar una de las principales preocupaciones de los posibles compradores de vehículos eléctricos: la compatibilidad de la infraestructura de carga. También es parte de un impulso más amplio de toda la industria para crear un ecosistema de carga más cohesivo, fomentando la interoperabilidad y reduciendo posibles inconvenientes para los propietarios de vehículos eléctricos.
El esfuerzo colaborativo tiene como objetivo crear un futuro en el que los usuarios de vehículos eléctricos puedan cargar sus vehículos sin problemas a través de diferentes redes de carga, eliminando la necesidad de múltiples adaptadores o preocupaciones sobre la compatibilidad de la carga. Para 2025, todos los vehículos eléctricos de Ford cambiarán al estándar de carga NACS, lo que significa que todos vendrán equipados con el nuevo enchufe de carga NACS.