Cambiar el servidor DNS predeterminado en su sistema Windows puede beneficiarlo de varias maneras. En primer lugar, podría mejorar su velocidad de navegación si luchando con internet lento incluso después de tener un plan rápido. Esto se debe a que el DNS desempeña un papel fundamental en la carga de páginas web y algunos DNS de terceros, como el de Google, pueden procesar su solicitud más rápido.
Algunos servicios DNS ofrecen funciones de seguridad a nivel de DNS, como protección contra phishing y bloqueo de sitios web maliciosos. Estas características aseguran una experiencia de navegación más segura y mejorar la seguridad general de su PC. Es posible que la configuración DNS predeterminada no sea confiable y provoque caídas frecuentes. Cambiarlo por uno confiable puede reducir la frecuencia del sitio web.
Algunos ISP utilizan el bloqueo de DNS para imponer restricciones de contenido regional. Un servidor DNS diferente puede ayudar a evitar estas restricciones, permitiendo el acceso a una gama más amplia de contenido. Por el contrario, algunos DNS ofrecen controles parentales para restringir contenido para adultos, plataformas de redes sociales u otros sitios web no aptos para niños.
Finalmente, si tienes problemas continuos con DNS errores como «el servidor DNS no responde», cambiarlo podría resolver el problema.