Naturalmente, deberá verificar una y otra vez que la palanca de cambios del vehículo esté fija en la posición Estacionamiento (P) y que el freno de emergencia esté activado antes de verificar el líquido de la transmisión con el motor en marcha. Revisar el líquido también puede ser un trabajo sucio, por lo que es posible que desees tener guantes y una toalla a mano antes de comenzar. Con el motor caliente y el vehículo inmóvil, siga estos pasos para revisar el líquido de la transmisión.
- Abra el capó de su vehículo y asegúrese de que esté en posición vertical y bloqueada.
- Localice la varilla medidora del líquido de la transmisión. La ubicación puede variar según su automóvil, pero la manija suele ser de color rojo o amarillo. Consulta el manual del propietario de tu vehículo si no estás seguro de dónde está ubicada la varilla medidora del líquido de la transmisión.
- Retire la varilla medidora de su cámara y límpiela con un paño.
- Vuelva a insertar la varilla medidora y retírela nuevamente, verificando el nivel de líquido con el nivel recomendado indicado en la varilla medidora.
- Si el nivel de líquido es bajo, deberá agregar un poco lo antes posible.
Si no estás seguro ¿Qué líquido de transmisión se adapta mejor a su vehículo?, es probable que la información se pueda encontrar en el manual del propietario. Mientras inspecciona la varilla medidora, también debe verificar el color y la viscosidad del líquido de la transmisión. El líquido de transmisión nuevo suele ser de color rosado o transparente y se vuelve marrón con el tiempo. Si el líquido de su vehículo es marrón o huele a quemado, probablemente sea hora de cambiarlo. Lo mismo ocurre si contiene partículas de suciedad visibles, que también puede palpar limpiando el líquido de la varilla medidora con un dedo enguantado y frotándolo sobre el pulgar.