Este es quizás el error más fácil de solucionar. Si su Raspberry PI no se enciende, es probable que su fuente de alimentación no esté funcionando. Todo lo que tienes que hacer aquí para solucionar el problema es conectar una fuente de alimentación diferente. Sin embargo, existen requisitos de energía para cada modelo de Raspberry Pi.
La forma en que abordes el reemplazo de la fuente de alimentación dependerá de la versión de Raspberry Pi con la que estés trabajando. Por ejemplo, la Raspberry Pi 4 no funcionará con una fuente de alimentación de una Raspberry Pi 3. La Pi 4 introdujo una entrada USB-C con un requisito mínimo de 5 V 3 A. Por el contrario, el Pi 3 tenía un puerto micro-USB con un requisito de 5V 2,5A. Sin embargo, el Pi 5 funcionará con una fuente de alimentación Pi 4, a pesar de tener un requisito de 5V 5A. Simplemente no funcionará de manera óptima.
Si eres hábil y no quieres tener que enchufar tu Raspberry Pi, puedes instalar una batería LiPo como fuente de energía alternativa. Está lejos de ser una solución oficial y, como muestra el YouTuber Antalz en su video instructivo, puede resultar un poco complicado. Por otra parte, los pasos necesarios para convertir su Pi en una unidad más móvil pueden valer la pena, dependiendo de la aplicación.
Sin embargo, si sigues con las fuentes de alimentación convencionales, tienes opciones como con Adaptador de 27W, 5.1V 5A de GeekPi.
Raspberry Pi tiene un indicador LED PWR rojo, que proporciona los siguientes indicadores básicos:
- Consistente: encendido y operativo
- Parpadeando: voltaje inferior a 4,64 V
- Apagado: Energía insuficiente para encender