El auge de la inteligencia artificial y el software de aprendizaje automático como ChatGPT de OpenAI en los últimos años ha llevado a las principales empresas de tecnología a invertir dólares exorbitantes en ellos. Microsoft, por ejemplo, invirtió 13 mil millones de dólares en OpenAI y comenzó a utilizar su tecnología en el motor de búsqueda Bing. Microsoft es fácilmente uno de los nombres más importantes de la industria tecnológica y no es ajeno a siendo un poco turbio detrás de escena.
Por lo tanto, no sorprende que Microsoft, junto con Nvidia y OpenAI, forme parte de una investigación federal encabezada por el Departamento de Justicia para investigar una posible colusión. Si bien Nvidia es bien conocida por sus tarjetas gráficas, también está trabajando diligentemente en hardware de inteligencia artificial. Mientras tanto, la Comisión Federal de Comercio (FTC) está tomando la iniciativa en la investigación de OpenAI y Microsoft.
Cuando el FTC lanzó su investigación, su presidenta Lina M. Khan dijo: «Nuestro estudio arrojará luz sobre si las inversiones y asociaciones realizadas por empresas dominantes corren el riesgo de distorsionar la innovación y socavar la competencia leal». Vale la pena señalar que Estados Unidos ha tardado un poco en regular la IA, quedando muy por detrás de los El progreso de la Unión Europea en la implementación de regulaciones sobre IA. El tiempo dirá si Microsoft ha estructurado sus acuerdos con nuevas empresas de IA y su participación en OpenAI de tal manera que eluda el escrutinio antimonopolio.