Como seguramente recordarás, Microsoft es una de las compañías incluidas en la lista de Gatekeepers de la Ley de Mercados Digitales de la Unión Europea, una normativa comunitaria que pretende regular el modo en el que pueden actuar los grandes gigantes tecnológicos que ofrecen sus productos y servicios en el espacio común europeo. Recordemos los plazos clave de este reglamento:
- Aprobación: 19 de octubre de 2022.
- Entrada en vigor: 16 de noviembre de 2022.
- Fecha de aplicación: 17 de febrero de 2024.
Ahora bien, hay otra fecha clave, el pasado 6 de septiembre, que es cuando los reguladores europeos publicaron la lista de las empresas que se verán directamente afectadas por esta nueva norma, si bien es clave recordar que la misma no se aplica a las empresas como tales, sino de manera individual a los productos y servicios que superen los umbrales establecidos por los reguladores para cada categoría, como ya te contamos en su momento. Así, las seis empresas afectadas por la norma son:
- Alphabet (matriz de Google)
- Amazon
- Apple
- Bytedance
- Meta
- Microsoft
En el caso de Microsoft, que es el que nos ocupa, son tres las categorías en las que encontramos su nombre, obviamente en sistemas operativos por Windows, también en redes sociales por LinkedIn, y completa el trío el servicio de publicidad en línea de los de Redmond. No obstante, como también te contamos en septiembre, a instancia de Microsoft la UE abrió tres investigaciones, con el fin de determinar si Bing, Edge y la plataforma de publicidad de la compañía también deberían someterse a la regulación determinada por la DMA.
Así, Microsoft ha estado esperando con bastante preocupación (y sigue haciéndolo) el sentido en el que se pronunciarán los reguladores, pero aunque todavía no hay nada seguro, parece que al final de ese sendero se encontrarán con una buena noticia. Y es que, según podemos leer en Bloomberg, fuentes de la Unión Europea señalan a que Bing, Edge y los servicios de publicidad de Microsoft estarán exentos de estas regulaciones, al no alcanzar los mínimos establecidos en sus respectivas categorías.
Las conclusiones y la decisión definitiva tendrán que pronunciarse, como tarde, en febrero, por lo que todavía tendremos que esperar hasta conocer el resultado final de las deliberaciones, de modo que la información publicada por Bloomberg todavía no es definitiva. No obstante, parece bastante probable que finalmente la investigación se zanje con este resultado, pues muy a su pesar por otras razones, es cierto que la cuota de mercado de los servicios bajo investigación es claramente bastante baja, por lo que tiene todo el sentido excluirlos de las férreas regulaciones a las que sí que se tendrán que adaptar los servicios mayoritarios.