El agarre y la tracción de los neumáticos son factores críticos en el manejo de un automóvil. Especialmente en el caso de los coches orientados al rendimiento, es necesario crear más carga aerodinámica para mantener el neumático pegado de forma segura al asfalto. La solución fácil es añadir más peso al coche para evitar que se deslice a altas velocidades. Sin embargo, el peso añadido afecta directamente la aceleración del coche y sabotea el manejo de otras maneras. En cambio, los ingenieros han ideado spoilers para cuidar la carga aerodinámica a altas velocidades.
Un spoiler crea una superficie que redirige el viento. Cuando el viento golpea la superficie y sube, el alerón empuja el automóvil hacia abajo; esta es la tercera ley del movimiento de Newton. Cuanto más rápido vaya el coche, más notorios serán los efectos del alerón trasero. Por ejemplo, el El enorme alerón trasero del McLaren Senna GTR es un excelente ejemplo de una pieza aerodinámica bien diseñada que crea mucha carga aerodinámica.
Además, los spoilers se utilizan para reducir la resistencia. La resistencia es la resistencia natural del aire contra un objeto en movimiento. Los spoilers traseros permiten a los autos reducir la resistencia y reducir la turbulencia que la acompaña.