Por qué es importante: Apple y otras empresas han promulgado numerosas medidas para garantizar que los AirTags y dispositivos de seguimiento similares no se utilicen para acechar. Aún así, un grupo de investigadores está decepcionado con los últimos métodos oficiales. Un artículo reciente describe una solución que podría resolver el compromiso entre privacidad y seguridad.
Investigadores de la Universidad Johns Hopkins y la Universidad de California han sugirió un conjunto de herramientas criptográficas que podrían contrarrestar el acecho de AirTag mejor que las medidas actuales de Apple. Los investigadores creen que las funciones antiacecho predeterminadas de Apple pueden comprometer la privacidad de los usuarios legítimos.
El problema central es determinar cuándo se utiliza un AirTag con fines ilícitos. Los teléfonos inteligentes pueden alertar a los usuarios cuando AirTags extranjeros los siguen a través de largas distancias, pero el sistema de alerta tiene dificultades para diferenciar entre acosadores y amigos o familiares que también poseen AirTags.
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La respuesta de Apple al problema cambia los mandos entre dos modos dependiendo de su proximidad a sus dispositivos emparejados. Cuando un AirTag permanece cerca del dispositivo del propietario, como su iPhone, cambia entre claves de identificación cada 15 minutos para garantizar que solo el propietario pueda detectar el AirTag. Sin embargo, si el mando está alejado del dispositivo emparejado durante un período prolongado, la clave solo cambia una vez al día, lo que permite a las posibles víctimas de acoso identificar más fácilmente los AirTags extranjeros. como manzana coordenadas Junto con otras empresas para homogeneizar los protocolos de seguridad entre plataformas, el método de la empresa podría convertirse en el estándar, lo que preocupa a los investigadores.
El modo «ausente» elimina efectivamente el anonimato de un AirTag, pero los investigadores descubrieron que muchos usuarios los alejan con frecuencia de sus dispositivos emparejados, transmitiendo así constantemente sus ubicaciones y movimientos. Una posible causa es que las familias que comparten llaveros no pueden emparejarlos fácilmente con varios dispositivos. Además, un visitante amigable que lleve su AirTag podría confundir al sistema.
Según la propuesta de los investigadores, los llaveros siempre cambiarían constantemente sus señales clave, pero los dispositivos solo podrían identificarlos después de recibir una cierta cantidad de señales a corta distancia, lo que indica que un AirTag está siguiendo a alguien. Mientras tanto, un actor malintencionado probablemente pasaría mucho tiempo alejado del control remoto y no reuniría suficientes señales para identificarlo. Un segundo componente del sistema ayudaría a cada dispositivo a diferenciar entre señales si hay muchos AirTags u otros dispositivos Apple en el modo «Buscar mi» cerca.
Los investigadores tienen enviado su estudio a Apple y al consorcio de empresas que cooperan en el seguimiento de llaveros, pero los fabricantes no han mostrado ningún interés en los hallazgos hasta el momento.