“Productos y servicios desarrollados en el Reino Unido [will] se volverán menos atractivos, porque quienes los adopten temerán que hayan sido diseñados para el acceso del gobierno, y el Reino Unido se convertirá en un objetivo más atractivo para delincuentes y estados nacionales hostiles”, advirtieron los grupos.
Puertas traseras de cifrado
La ley revisada podría tener graves repercusiones para la innovación tecnológica del Reino Unido, lo que podría impulsar el talento tecnológico a otros lugares, según Nick France, director de tecnología de Sectigo, un proveedor de tecnología que se especializa en la gestión de certificados digitales.
“Con su impulso por puertas traseras de cifrado y la capacidad de otorgar, o no, permiso a las empresas para parchear vulnerabilidades, [the Act] está haciendo sonar las alarmas en el sector tecnológico”, dijo. «Es un arma de doble filo, que obstaculiza la innovación y la competitividad y al mismo tiempo debilita la seguridad».
Francia concluyó: “En última instancia, la enmienda puede lograr lo contrario de su propósito declarado, poniendo en peligro la seguridad nacional y el crecimiento económico en la búsqueda de mayores capacidades de vigilancia”.