En breve: La preocupante tendencia de la suplantación de GPS, que puede hacer que los sistemas de navegación de los aviones muestren una ubicación incorrecta o una hora falsa, es un problema creciente. Esta cuestión también está resultando difícil de abordar, y la única solución a corto plazo parece ser una mejor formación de los pilotos.
En septiembre del año pasado, OpsGroup, un grupo internacional de 8.000 pilotos, despachadores, programadores, controladores y técnicos de vuelo, comenzó a resaltar incidentes en los que aviones comerciales en la región del Medio Oriente recibieron señales de navegación GPS falsificadas. Estos ataques, que los países suelen utilizar como defensa contra aviones y drones enemigos, también afectan a los sistemas de navegación de reserva, lo que resulta en un fracaso total.
Los ataques utilizan un vector específico que OpsGroup describe como «impensable» y expone un «fallo fundamental en el diseño de aviónica». La suplantación afecta al Sistema de Referencia Inercial (IRS) de la aeronave, utilizado para ayudar a los aviones a navegar.
La semana pasada, reguladores globales, especialistas en seguridad de la aviación y fabricantes se reunieron para tratar de encontrar una solución técnica rápida al problema de la suplantación de GPS cerca de zonas de guerra. Reuters. Los asistentes no lograron ponerse de acuerdo sobre un plan y, en cambio, pidieron una mejor capacitación para los pilotos para enfrentar el problema.
El creciente número de zonas de guerra en todo el mundo ha visto empeorar recientemente la interferencia y la suplantación de GPS. OpsGroup dijo que Europa del Este, el Mar Negro y Oriente Medio eran puntos críticos de estos incidentes.
La reunión de la semana pasada, organizada por la Agencia de Seguridad Aérea de la Unión Europea (EASA) y el grupo comercial internacional Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA), se celebró en Colonia, Alemania. En una declaración conjunta, los organizadores dijeron que la interferencia del GPS «puede plantear desafíos importantes para la seguridad de la aviación». También pidieron un mayor intercambio de datos sobre los incidentes, así como datos de seguridad del GNSS (Sistema Global de Navegación por Satélite), orientación universal sobre incidentes por parte de los fabricantes de aviones y un compromiso de los estados de conservar los sistemas de navegación tradicionales como respaldo en los casos en que los GNSS sean falsificados o apretado.
Según una fuente, las soluciones técnicas a los ataques de interferencia de GPS deberían actualizarse constantemente, creando un juego del gato y el ratón. Se discutió una solución a largo plazo que implicaba desarrollar una segunda capa de autenticación para verificar si las ubicaciones GPS estaban siendo falsificadas.
Otro obstáculo es el tiempo que lleva certificar ciertas tecnologías en la industria de la aviación civil, cuya aprobación a veces puede tardar una década.
Israel ha utilizado la falsificación de GPS para tratar de protegerse de los ataques con misiles de Hezbolá. Ha advertido a los pilotos que aterricen en el país que no deberían confiar en el GPS para aterrizar y, en cambio, confiar en métodos de navegación alternativos.