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El mercado de las consolas se encuentra en un momento complejo y, sin duda, Xbox es la plataforma que más afectada se está viendo por esta situación. El ejemplo más claro de ello lo veíamos hace tan solo un par de días, al saber que tanto desarrolladores como minoristas europeos pueden estar planteándose retirar su apoyo a la generación actual de la consola de Microsoft. Y es que a dichas circunstancias, debemos sumar el enorme cúmulo de desaciertos de Microsoft en la anterior generación, algo que incluso el propio Spencer ha mencionado, en más de una ocasión, como un gran lastre de Xbox Series X|S.
Es cierto que el máximo responsable de Xbox afirmó, recientemente, que habrá una futura generación de la consola y a ese respecto, apoyándose en lo adelantado por Spencer, mi compañero Isidro hizo un muy completo e interesante análisis de lo que podría ser la next-gen de Microsoft. Ahora bien, contar con una plataforma técnica de enorme rendimiento es solo una parte de la ecuación, y en según qué condiciones puede terminar no siendo la más importante.
Tenemos que poner el foco en los juegos, en los títulos disponibles para la plataforma (y aquí volvemos, de nuevo, a uno de los principales errores de la generación pasada). A este respecto, Microsoft ha sabido mover ficha con la adquisición de estudios, y aquí debemos poner el foco en Zenimax y en Activision Blizzard King, así como en los acuerdos con otras desarrolladoras y distribuidoras, algo que ha servido, además, para nutrir el catálogo de Xbox Game Pass.
Sabemos que uno de los planes de Microsoft pasa por extender el alcance de Xbox, tanto mediante Xbox Cloud en múltiples plataformas, como con el salto de algunos de sus juegos que hasta ahora eran exclusivos a las consolas rivales, pero parece que esta es solo una parte del plan. La otra parte, según leemos en Ars Technica, es que Phil Spencer quiere que las tiendas digitales de terceros lleguen a Xbox.
Así, y en lo referido a los juegos, parece que la estrategia adoptada por Microsoft pasa por extender el alcance, tanto de sus propios títulos a tantas plataformas como resulte posible, como el de la máxima cantidad de títulos posibles a su propia plataforma. No obstante, de momento el movimiento para renunciar a sus exclusivos ha resultado de lo más tímido, y la llegada de nuevas tiendas a Xbox es, de momento, un planteamiento y no una realidad. Por lo tanto, aún tendremos que esperar hasta comprobar el alcance final de este cambio de modelo planteado por Spencer.
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